Y cada vez que el narrador intentaba, seca ya la fuente de su inspiración dejar la narración para el día siguiente, y decía: "El resto para la próxima vez", las tres, al tiempo, decían: "¡Ya es la próxima vez!"

Alicia en el país de la maravillas. Lewis Carroll

domingo, 26 de septiembre de 2010

Los queridos libros (13)












Ah! Es el libro un espacio dilatado,
donde brilla lo vital de un hecho humano
con reflejos de análisis, de aracano,
que en el alma abre juicios no pensados.
Es un amigo del hombre angustiado,
al llevarlo a un bello edén lejano,
y pule el intelecto soberano
de todo aquél que lea concentrado.
El pobre hombre también es creador
de una grata fusión de pensamientos,
cual Dios que crea los astros y el albor...
El es como un volcán en erupción,
que daña a los gobiernos virulentos
y señala la eterna salvación.

No hay comentarios:

Publicar un comentario