Sucumbe la noche y llega la luna, los lobos esperan para calmar su hambruna, vestidos de seda se dan una vuelta y encuentran un sitio que su curiosidad despierta.
Poco a poco en el adentran y disponen sus cuerpos para beber cerveza, ocupan su sitio y allí se quedan, marcan territorio como todas unas bestias.
El alcohol penetra en sus venas y en su cabeza y hace de su ser lo mas frívolo y loco de la naturaleza.
A lo lejos se ve su presa una loba de pies a cabeza, que muestra sus tetas y danza con gran belleza, eso nadie lo niega, se exhibe y se toca para provocar destrezas, en los lobos que tienen en ella su mirada bien puesta.
De inmediato ataca el primero y la embriaga hasta que algo le suelta, un beso, el brassiere o un cuco que inquieta, eso solo lo sabe el primer lobo que se avienta.
Llega el segundo lobo y ataca sin crudeza, se la lleva al cuarto obscuro y en un rincón la penetra, se la come y ni una sobra deja, pues la loba esta tan buena que se merece hasta que la desaparezca.
Llega el tercer lobo y con otros ojos la ve y por supuesto la besa, pues esa oportunidad no la pierde ni por lo mas mínimo de su existencia, es que esa loba esta muy buena, pero tiene algo mas que a el le interesa y se queda con ella esperando a que aquel sitio cierre sus puertas.
Esta es una historia dedicada a todas las lobas de la sociedad y los lobos que buscan sus presas.
ResponderEliminary donde quedamos los cachorros y los aprendices?
ResponderEliminar