Y cada vez que el narrador intentaba, seca ya la fuente de su inspiración dejar la narración para el día siguiente, y decía: "El resto para la próxima vez", las tres, al tiempo, decían: "¡Ya es la próxima vez!"

Alicia en el país de la maravillas. Lewis Carroll

viernes, 25 de febrero de 2011

Hay muchas mas casitas del horror vestidas de oro

Jum esa casita del horror, que estuvo incrustada en nuestra memoria desde que eramos chicos y que quiza en el mente de muchos sigue allí.

No sólo tiene que ser una construcción asi para poder trasmmitir terror, pues existen muchas casas lujosas, como la del Palacio de Nariño, la cual puede transmitir mucho pero mucho mas terror, miedo y angustia, sólo que lastimosamente este país conocido como el del sagrado corazón, sólo vive de apariencias y ante las ocsas que son tan evidentes se hacen los ciegos, quiza sólo quieren ver ciertas cosas y obviar otras cuantas.
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